COLOSENSES 3.12-14 En un día cualquiera, podemos encontrar personas y situaciones frustrantes, como un conductor lento, un niño revoltoso, o un compañero de trabajo poco colaborador. Podemos sentir la tentación de estallar de ira, pero Dios quiere que mantengamos la calma y seamos pacientes con todos (1 Ts 5.14).
¿Por qué debemos ser pacientes?